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Pocas luces muestran las investigaciones en glioblastoma multiforme, un tumor que se lleva cualquier esperanza de calidad de vida. Pero, recientemente investigadores del CONICET propusieron que posiblemente un bloqueante, usado para tratar el asma de difícil control, podría actuar de modo directo sobre el tumor o a través de la respuesta inmune, en particular al modular la fisiología de los neutrófilos, constituyéndose así en un blanco terapéutico promisorio.

El glioblastoma multiforme (GBM) es un tumor grande y su desarrollo es rápido. Los síntomas podrían pasar desapercibidos sin que se sospeche que hay algo mortal creciendo en el cerebro; se trata de dolor de cabeza, náuseas y vómitos. Sin embargo, llega el momento en que se presentan signos neurológicos como alteraciones del estado mental que pueden incluir cambios en la personalidad.

La edad media de aparición es de 62 años, es más frecuente en afroamericanos, latinos y asiáticos; e incide más en hombres que en mujeres. En 2020, según la base de datos Global Cancer Observatory de la Organización Mundial de la Salud, se registraron 168.346 nuevos casos de cáncer en el cerebro y el sistema nervioso central en hombres y 139.756 en mujeres. A nivel geográfico, el 77.6 % de los casos se registraron en Sudamérica, de ellos 12.052 eran hombres (52.59 %) y 10.864, mujeres (47.43 %).

El GBM es altamente resistente a la radioterapia y la quimioterapia, y la cirugía no es capaz de eliminar por completo el tumor, por esta razón las terapias actuales conducen solo a una mejora temporal y limitada. Como consecuencia, se presentan recaídas entre el séptimo y el décimo mes después de iniciar el tratamiento, que se llevan la esperanza y la calidad de vida de los pacientes, quienes muchas veces van perdiendo el habla, la movilidad… la vida.

Este tipo de tumores se compone, además de células tumorales, con células del sistema inmune. Como señala la doctora en Ciencias Biológicas Gabriela Salamone, experta en Neuroinmunooncología: “El papel del sistema inmune en el cáncer es crítico”. Al comienzo del desarrollo del tumor hace frente a las células tumorales, y es lo que se conoce como fase de eliminación; luego hay una fase de equilibrio y, finalmente, una fase de escape donde el cambio de perfil del sistema inmune aumenta los mecanismos de evasión. En esta última etapa se silencian todas las alarmas para que el tumor no pueda ser destruido naturalmente, lo que ayuda a su progresión.

Recientemente, se ha relacionado a una proteína que ayuda a equilibrar el sistema inmune y que está presente en patologías alérgicas, con la patogénesis de diferentes tumores, como el cáncer de mama. Su nombre es linfopoyetina estromal tímica (TSLP, traducido del inglés thymic stromal lymphopoietin). Es producida principalmente por células epiteliales del pulmón, la piel y el intestino. Por esta razón, el grupo de Células Presentadoras de Antígeno del Instituto de Medicina Experimental (IMEX, CONICET – Academia Nacional de Medicina), que históricamente ha trabajado en el área de alergias, se preguntó si existe una interacción entre la TSLP y las células inmunes en el GBM. Este trabajo evaluó la presencia de TSLP en las células del sistema inmune que componen el tumor y propuso un nuevo rol de esta proteína para el GBM, la cual podría actuar directamente sobre el tumor o a través de la respuesta inmune, en particular al modular la fisiología de los neutrófilos.

Estos resultados podrían tener relevancia clínica al postular a la TSLP como un modulador clave en la patogénesis del GBM, posicionándola como un prometedor blanco terapéutico. Salamone, quien es investigadora independiente del CONICET, asegura: “Aún falta mucho por recorrer, pero contar con un posible blanco terapéutico arroja una esperanza de luz para mejorar la calidad de vida de los pacientes, más aún en el caso del GBM que es muy agresivo y los pacientes no tienen mucha chance. La ventaja es que existen bloqueantes de la TSLP que ya se usan para tratar el asma de difícil control, los cuales podrían ser evaluados para esta patología”.

Sin duda es un camino largo pero prometedor y todos los sacrificios tienen su recompensa. Lo más difícil de trabajar con tumores de cerebro —según Salamone— es conseguir las muestras de pacientes y mantener un cultivo primario a partir de las biopsias de tumor de cerebro, para poder simular el ambiente tumoral. Sin embargo, la experta aconseja a los jóvenes que inician su camino en investigación oncológica, que se apasionen con el trabajo que podría mejorar la vida de los pacientes. Además, hace un llamado a la paciencia en estas nuevas generaciones pues muchos resultados son negativos y puede resultar frustrante; sin embargo, cuando los resultados arrojan una luz resulta muy gratificante.

Por último, Salamone envía un mensaje de incentivo a las mujeres científicas y madres: “Se puede hacer todo, es un trabajo compatible con la maternidad. De hecho, tengo tres hijos y siempre pude seguir investigando y publicando, aunque obviamente con sacrificio”.

Alejandra Infante Cruz es bacterióloga y laboratorista clínica por la Universidad Colegio Mayor de Cundinamarca, Colombia, y máster en Microbiología por la Universidad Nacional de Colombia. Becaria del Instituto de Medicina Experimental (IMEX-CONICET) en el Laboratorio de Inmunidad Oncológica de la Academia Nacional de Medicina. Se formó en el curso de Divulgación Científica de la Facultad de Farmacia y Bioquímica (UBA).

De izquierda a derecha: Gabriela Salamone, Paula Saibene y Alejandra Infante Cruz

Artículo de base

Infante Cruz, Alejandra; Coronel, Juan Valentín; Saibene Vélez, Paula; Remes Lenicov, Federico; Iturrizaga, Juan; Abelleyro, Martín; Rosato, Micaela; Maiumi Shiromizu, Carolina; Candolfi, Marianela; Vermeulen, Mónica; Jancic, Carolina; Yasuda, Ezequiel; Berner, Silvia; Villaverde, Marcela Solange; Salamone, Gabriela Verónica. Cellular and Molecular Neurobiology (2024) 44:31. https://doi.org/10.1007/s10571-024-01462-9

POSIBLE BLANCO TERAPÉUTICO PARA ATACAR A UN CÁNCER DE CEREBRO MORTAL EN ADULTOS

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¿Cuál es el promedio de edad en que suele diagnosticarse el glioblastoma multiforme (GBM)?

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¿Cuál es el principal desafío del sistema inmune frente al GBM?

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¿Qué proteína se relaciona con el sistema inmune y la progresión del GBM?

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¿Qué porcentaje de casos de cáncer en el cerebro y sistema nervioso central se registraron en Sudamérica en 2020?

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