Sin lugar a dudas, las herramientas digitales que se usan con fines educativos para la visualización de macromoléculas biológicas, tales como las proteínas, son de gran ayuda, especialmente para comprender la relación que existe entre su estructura y la función que cumplen en el organismo. Sin embargo, las representaciones digitales carecen de muchas de las ventajas que tienen los esquemas físicos. En este contexto, docentes e investigadores de la Facultad de Farmacia y Bioquímica, UBA, estudian, diseñan y proponen actividades disruptivas que combinan el uso de aplicaciones digitales con el armado de un modelo “tangible” de papel.


